Elegancia exquisita y canchera frescura en el BAF 2011

Evangelina Bomparola y Uma presentaron sus colecciones para las estaciones cálidas y fueron furor. La primera, por la maravillosa calidad de sus telas y el halo exclusivo de su colección. La segunda, por su impronta joven y el coqueto desfile que organizó en el jardín japonés.
Se trató de las dos colecciones más visitadas por los famosos y los miembros de la alta sociedad porteña. Los integrantes de la farándula argentina deliraron por los atuendos de Bomparola y aplaudieron a rabiar las propuestas de Uma.
El estilo que define siempre a las colecciones de Bomparola es el casual chic: sus fans son mujeres que aprecien la calidad y la exclusividad.



Otra de las características distintivas es que los diseños son extremadamente funcionales y atemporales.



Este look casual chic se vio en su pasada de primavera/verano 2011-12 directamente influido por un futurismo retro con aires de fines de los ´60s y principios de los ´70s.



Se utilizaron muchos colores combinados con el nude, protagonista principal de la nueva colección. La tendencia minimalista de Evangelina es una constante, y estuvo presente incluso a pesar del uso de colores shocking como el naranja y el fucsia.
Fue marcada la presencia de la sastrería marcada en los hombros, que sigue las formas de cintura y cadera. Sin embargo, los trajecitos toman de la túnica los recortes y la composición de colores.
Muy liviana, casi etérea, toda la colección partió de una prenda fetiche: la túnica. A partir de esa pieza la diseñadora creó todas las formas que la acompañan. Las formas sueltas fueron una constante.
La diseñadora charló con MDZ Sociales y defendió el color negro. “A pesar de que en esta colección nos jugamos por el color, yo defiendlo al negro. Dicen que la oscuridad es el vacío. Dicen que el negro es la ausencia de color. Dicen, dicen, dicen… Podría decirse también que todo lo que se dice es relativo y subjetivo. Tiene algo de verdad según la subjetividad de quien lo diga”, comentó Evangelina.



“En mi caso, pienso que el negro te entrega la posibilidad de combinarlo con todos los colores. La oscuridad de ningún modo es el vacío. Solo es cuestión de atravesarlo, sin miedo”, concluyó.
La propuesta estuvo llena de luz y color (blanco, nude, fucsia, naranja y amarillo). El negro se vio en algunos detalles (cierres, recortes, solapas). ¿Un objeto de adoración? Los stilettos. Fueron muchas las que quedaron sin aliento por la altura de los tacos.



El material por excelencia fue la seda natural, en muchas de sus versiones: doble georgette, organza, georgette, crepe y gasa.
“La paleta de colores la elegí porque para mí, cada tono tiene un poder de visualización y una razón de estar: el negro es el punto de partida y simboliza la presencia/ausencia de color. El fucsia simboliza la espiritualidad y la creatividad. El amarillo se refiere al valor de lo propio. El naranja es el color de la alegría y del bienestar físico. El blanco simboliza la luz. Finalmente el nude es el que para mí conecta y complementa a todos los colores”, explicó Evangelina.
En cuanto a los detalles: cierres abiesados a la vista cierran tops y vestidos en la espalda. Recortes que forman rayas, cuadrados, rectángulos y triángulos.

Uma presentó una colección joven, fresca, canchera y femenina. Con una amplia propuesta de carteras, zapatos y ropa de cuero.



La nueva propuesta de esta marca llegó con la invitación a jugar con la combinación de prendas de noche y de día; y también hacer un mix de texturas y estampas.
Los zapatos son coloridos y con detalles como flecos, tachas y hebillas personalizadas. Se adaptan a todos los estilos. Hay abotinados de lona y cuero, ballerinas bordadas y rayadas, sandalias planas con mezcla de colores y texturas y los ya clásicos suecos.



Las carteras, al igual que los zapatos son bien diferenciadas y coloridas, todas

tienen algún detalle que la diferencian.
Las prendas que se destacan de la colección: una mini de cuero de oveja bordada. Camisa de cuero de oveja de gamuza. El piloto de gabardina con mangas de cuero. La campera de cuero de oveja liso combinado con piel animal print. La maxifalda plisada con forrería a contratono, el poncho con punto abierto, monoprenda bicolor, las prendas de Jacquard de seda, las chaquetas motoqueras de telar.
Las diseñadoras explicaron que “para esta temporada de verano nos inspiramos en lo marinero, militar y lo étnico. Utilizamos tipologías y recursos de lo marinero y militar como botones metálicos, martingalas y charreteras. Utilizamos lo étnico como inspiración de estampas, bordados, jacquards y accesorios”.
Los materiales que se destacan son las sedas lavadas, linos, viscosas, voile de seda, algodones livianos, cuero de oveja y cabra. Se utilizaron estampas figurativas y coloridas. La paleta de color de la colección consiste en violeta, rosa, celeste, camel, tostados, azul marino y los clásicos blanco y negro.